Ferit no podía negar la creciente atracción que sentía por Seyran. Cada día que pasaba, se sentía más cautivado por su belleza, inteligencia y encanto. Sin embargo, una duda constante lo atormentaba: la relación entre Seyran y Yusuf, un hombre de su pasado. Ferit no podía dejar de pensar en las señales y el comportamiento extraño entre ellos. ¿Acaso Seyran le ocultaba algo? Esas preguntas lo mantenían inquieto y preocupado.
Después de varios días de reflexión, Ferit decidió que no podía esperar más. Decidió enfrentarse a Seyran y preguntarle directamente sobre su pasado. Cuando planteó la pregunta, su voz estaba llena de preocupación y, al mismo tiempo, de desconfianza. Seyran, aunque sorprendida, no pudo ocultar el dolor en sus ojos. Respondió con firmeza, expresando lo herida que se sentía por la falta de confianza de su esposo. “Si no confías en mí, ¿cómo podemos seguir adelante?” dijo, con una mirada triste pero decidida.
Aunque devastado por la reacción de Seyran, Ferit no podía quitarse la duda de su mente. Decidió contactar a Yusuf, quien pensó que podría aclarar todo. Pero cuando se encontraron, Yusuf no solo confirmó que él y Seyran tuvieron una relación en el pasado, sino que no mostró ningún remordimiento. Esa amarga verdad fue como un golpe directo al corazón de Ferit. Se sintió confundido y decepcionado al enfrentarse a la traición de ambos.
La mentira de Yusuf obligó a Ferit a plantearse una gran pregunta: ¿Podría seguir confiando en Seyran? Los sentimientos encontrados llenaban su mente, mientras el amor que sentía por ella se veía amenazado por secretos que nunca imaginó descubrir.