Carmen, una amiga cercana de Miriam, no pudo evitar notar los pequeños cambios en el comportamiento de su amiga. Miriam, la secretaria hermosa y talentosa, parecía siempre incómoda cada vez que mencionaba el nombre de Joaquín, su jefe. Su rostro se sonrojaba, sus ojos se desviaban y sus labios se apretaban.
Al principio, Carmen pensó que Miriam solo se sentía tímida al hablar de su jefe frente a los compañeros de trabajo. Sin embargo, con el tiempo, los encuentros siguientes la hicieron estar más segura de que algo más estaba ocurriendo. Miriam constantemente encontraba excusas para estar cerca de Joaquín, lo escuchaba atentamente cuando él hablaba, y sus ojos siempre lo seguían con una mirada fascinada.
Una noche, después de horas de trabajo, Carmen decidió hablar abiertamente con Miriam. En el cálido ambiente de su cafetería habitual, Carmen comenzó: “Miriam, te noto diferente últimamente. ¿Qué está pasando?”
Miriam vaciló por un momento y finalmente rompió en llanto. Confesó que llevaba mucho tiempo enamorada de Joaquín. Admiraba su talento y su calidez, pero era demasiado tímida para expresar sus sentimientos. Temía que si Joaquín se enteraba de lo que sentía, la rechazaría.
Carmen abrazó a Miriam con fuerza, consolándola. Entendía perfectamente lo que sentía Miriam, ya que ella misma había pasado por experiencias similares. Carmen le prometió que la ayudaría a expresar sus sentimientos hacia Joaquín.
Los días siguientes, Carmen ayudó a Miriam a preparar un regalo de cumpleaños especial para Joaquín. También le sugirió formas sutiles de mostrar sus sentimientos. Miriam comenzó a recuperar su confianza y se volvió más proactiva al comunicarse con Joaquín.
En la fiesta de cumpleaños de Joaquín, Miriam encontró la oportunidad para declarar su amor. Le entregó el regalo que había preparado y le dijo que lo admiraba mucho. Joaquín se sorprendió por la confesión de Miriam. Admitió que también sentía algo por ella, pero temía que su relación afectara su trabajo.
Después de mucho dudar, finalmente Joaquín decidió aceptar los sentimientos de Miriam. Comenzaron a salir y su relación se fue profundizando cada vez más. Carmen se sintió muy feliz al ver que sus dos amigas habían encontrado la felicidad.