Un amor perdido, por ejemplo, es uno de los eventos que más ha marcado la vida de Sol. Un amor de su juventud que, aunque terminó de manera dolorosa, sigue presente en su corazón y en sus decisiones.

Este amor perdido es una fuente constante de dolor y nostalgia para Sol, y su recuerdo parece influir en cada paso que da, especialmente en sus relaciones con otros personajes.

Sol también proviene de una familia con una historia compleja y conflictiva.

Las tensiones familiares juegan un papel crucial en su carácter y en su forma de ver el mundo.

A lo largo de la serie, los secretos familiares que han sido guardados por años empiezan a salir a la luz, revelando la verdadera naturaleza de las relaciones que Sol mantiene con su entorno. Esto no solo añade dramatismo a su historia, sino que también enriquece su personalidad, haciendo que su lucha por sanar sus heridas emocionales sea aún más realista.

Uno de los elementos más oscuros del pasado de Sol es un trágico incidente en el que estuvo involucrado. Este evento no solo persigue a Sol hasta el presente, sino que es una de las razones fundamentales por las que decidió dedicarse a la enseñanza y convertirse en institutor.

La educación de los niños le brinda una forma de redención, un propósito que le permite lidiar con sus propios demonios internos y, a su vez, ayudar a aquellos que están en situaciones similares a las que él vivió.

Este trágico incidente es un recordatorio constante de sus propios errores y de la carga emocional que arrastra. Los espectadores son testigos de cómo este trauma sigue siendo un obstáculo en su vida, pero también una motivación para seguir adelante y encontrar un propósito.