Ayala y Petra comparten un momento íntimo en el que Ayala revela un secreto que ha estado guardando. Le cuenta que Don Alonso, después de reflexionar un tiempo, ha comenzado a sospechar que el accidente en la cacería no fue un simple accidente. Ahora cree que podría haber sido un intento de asesinato contra Curro. Esto pone a Ayala nerviosa, ya que si Don Alonso realmente llega a creer esto, las consecuencias podrían ser graves y dañar la reputación de toda la familia.
Mientras tanto, Cruz se siente aliviada al notar que su esposo está cambiando de opinión sobre el accidente. Sabe que él había sido escéptico acerca de la posibilidad de que el incidente fuera un complot, pero ahora está empezando a sospechar. Esto la tranquiliza un poco, ya que cree que finalmente las cosas comenzarán a aclararse. Sin embargo, también se da cuenta de que si Don Alonso comienza a dudar de la versión oficial, la familia tendrá que enfrentar tensiones y confrontaciones difíciles.
Curro, sintiendo que la situación está empeorando, decide pedirle a Abel que hable con su tío para aclarar todo lo que está pasando. Quiere asegurarse de que todos conozcan la verdad y evitar malentendidos que podrían resultar en conflictos innecesarios. Sin embargo, justo cuando intenta enfrentar la situación, Curro empieza a sentirse mal y su salud se deteriora rápidamente, lo que complica aún más las cosas. Este giro inesperado de los acontecimientos pone a todos en alerta, y la situación se vuelve aún más incierta.